La percepción de los profesionales de la aviación dominicana es que en el instituto dominicano de aviación civil existe grado de corrupción, hasta tal punto que mucho expresan que la actitud de algunos inspectores y funcionarios cuentan con el aval de las altas jerarquías.
La percepción puede que sea infundada como también que sea real, hoy es la oportunidad en que el Instituto Dominicano de Aviación Civil proyecte imagen de pulcritud a la familia aeronáutica y al país. Si al contrario la institución persiste en renovar la licencia a pilotos ilegales el Instituto estaría dando señales de corrupción.
Es hora de dar señal clara de mostrar una imagen apegada a la ley, los RAD y la seguridad operación, pero si el instituto dominicano de aviación civil se empeña en renovar la licencia a tres pilotos ilegales que ocupan posiciones la cuales le pertenecen a los nacionales dominicanos, estaría vendiendo la imagen de que en esa institución existen banda que se dedican a la corrupción administrativa apoyada por la gerencia media y alta de la institución, pero si toman la decisión correcta de cancelar la licencia de los ilegales, estarían dando una imagen de una institución que avanza en la eliminación de la corrupción administrativa. Y la percepción y comentario que existen en las redes, de que los funcionarios de bajo nivel actúan de manera indecorosa con el apoyo de los funcionarios del nivel más altos.
El IDAC debe y está obligada en erradicar la conducta del Doctor Joaquín Balaguer en sus expresiones que “sentenciaba la corrupción se detiene en la puerta de mi despacho. Una forma de institucionalizar la corrupción pública en el país”.
En los gobiernos del presidente ciego, surdo y mudo también decía en mi gobiernes cada años diez familia se transforma en millonarios.
Las familia aeronáutica y la industria aérea esta a la espera de que el IDAC de la señal correcta. Y confía en que los funcionarios de más alto nivel tomen la decisión correcta, quitando el apoyo a los funcionarios que actúan de forma indecorosa en la institución.
Es hora de corregir los errores que se han cometido en el pasado, pero si la institución continua cometiendo los mismos errores estaría dando señales desviadas, y todos los funcionarios serios, estarían en la misma posición que los funcionarios corruptos que existen en las instituciones publica del país.
El 16 de junio es el día en que se cumple el plazo para la renovación de las licencia de los pilotos ilegales, que ocupan puesto de trabajo que por ley le pertenecen a los nacionales dominicanos.
La cancelación inmediata de la licencia a esos ilegales le daría a la institución el más alto nivel o grado de una institución pulcra, honesta y que trabaja en la eliminación de la corrupción administrativa, ademas que los funcionarios gerenciales estarian demostrando un alto nivel de confianza a la familia dominicana.